De pecadores y virtuosos
Desde un aspecto legal, todo ciudadano es inocente hasta que se demuestre lo contrario, no puede declararse culpable a menos que haya pruebas fehacientes en su contra. Desde el punto de vista de muchas doctrinas religiosas, es lo contrario: somos todos pecadores (culpables) por nuestra naturaleza humana, propensos a faltar a los 10 mandamientos y cometer cada uno de los 7 pecados capitales. No estoy aquí para cuestionar doctrinas, sistemas o mandatos religiosos; tampoco para establecer una postura de lo que está bien y lo que está mal. Este es un Ejercicio Pensante bastante incómodo cuya única finalidad es acompañarnos en una reflexión que nos permita despertar y ampliar nuestra consciencia. Así es que te invito a prepararte tu bebida preferida ( no alcohólica ) y leer (escuchar) desde una mente abierta y neutral. Las enseñanzas impartidas a los niños a través del catecismo, las escuelas dominicales y otras prácticas ‘educativas’ establecidas por cada institución reli...